10 de abril de 2020








¿Qué se celebra el Viernes Santo?


La celebración de Viernes Santo es una de las más representativas y profundas de la liturgia y piedad de la Iglesia. Se conmemora la crucifixión y muerte del Señor, razón por la cual los fieles guardan ayuno y abstinencia de carne como penitencia por sus pecados que han merecido tales tormentos al Señor. 

Viernes Santo

Viernes Santo  No hay celebración de la Eucaristía, pero sí celebraciones litúrgicas.  En lugar de la Eucaristía se celebra la Liturgia de la Pasión del Señor a la hora más cercana a las 15:00, por ser la hora en que murió Jesús. Los ornamentos de este día son de color rojo por la sangre derramada por Jesús en la Cruz y a lo largo de toda su Pasión. Es una celebración austera pero muy rica en significado. Los altares están desnudos, sin manteles ni adornos, pues han sido despojados tras la celebración de Jueves Santo. 

Peculiaridades del Viernes Santo

En la celebración litúrgica de Viernes Santo hay varias cosas peculiares.
  • Comienza en silencio y de rodillas:
Ya se empieza significativamente: en adorante y sobrecogedor silencio, el obispo y sacerdotes postrados en tierra mientras que el resto de fieles están de rodillas. En este día se proclama la Pasión entera, igual que Domingo de Ramos.
  • Adoración de la Cruz:
Es el único día del año en el que la cruz se adora, no se venera. La Cruz recibe el obsequio de nuestra genuflexión. Doblamos la rodilla ante ella. Esta cruz es mostrada al pueblo siendo despojada del velo que la cubre a la aclamación “Mirad el árbol de la Cruz, donde estuvo clavada la salvación del mundo. Venid, a adorarlo”. Tras esto, los fieles adoran la cruz con una genuflexión y un beso. 
  • Una colecta especial:
La colecta de este día es especial, pues está destinada al sostenimiento de los Santos Lugares en Tierra Santa. 

Devociones y costumbres populares del Viernes Santo

Este día es también marco cronológico para muchas devociones populares en torno a la Pasión del Señor. Es costumbre rezar el Via crucis, la meditación de las Siete Palabras que el Señor pronunció en la Cruz, las procesiones del entierro y la vela ante el sepulcro 
En este día que como hemos dicho es no hay eucaristía por estar de luto por la muerte del Señor, al igual que el Sábado hasta la celebración de la Vigilia Pascual, la Iglesia, en señal de su duelo también, hace callar las campanas que volverán a sonar cuando se anuncie que Cristo ha resucitado. En su lugar suenan unas matracas de madera, con un sonido muy característico. El órgano tampoco suena y el canto es monódico, evitándose la polifonía. 


¿Qué es el Via Crucis?

El Via Crucis es una de las prácticas piadosas más habituales durante los viernes de Cuaresma. Viernes Santo no podía ser menos. Lo que celebra la liturgia se extiende con el rezo del Via Crucis. 

Origen del Via Crucis

Su rezo es una costumbre muy antigua, ya desde finales del siglo V, cuando los cristianos de Jerusalén se reunían la mañana de Viernes Santo a venerar la cruz del Señor. Por la tarde volvían a hacerlo para escuchar la lectura de la Pasión. Muchísimos años después seguimos haciéndolo.
El Via Crucis es una manera de recordar la pasión de Jesús y de vivir con Él, acompañándolo en los sufrimientos camino al Calvario. Se reza caminando en procesión, al igual que Jesús realizó el camino al Calvario. Preside una cruz grande que va delante. Por el camino se van haciendo paradas para rezar cada una de las estaciones, ayudándose de la lectura de un texto evangélico u oracional. 

Cómo rezar el Via Crucis

La forma de rezarlo es sencilla. Tras la invocación de “Rezo del Santo Viacrucis. Por la señal de la santa cruz…”. Una breve monición a contemplar las estaciones. Seguidamente se rezan las 14 estaciones. Se anuncia la estación y acto seguido la jaculatoria “Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos”, a lo que se contesta “Porque con tu Santa Cruz redimiste el mundo”. Tras la lectura de un texto (evangelio o no) se reza un Padre Nuestro y un Avemaría. Finaliza el rezo de cada estación con “Pequé, Señor, pequé”, “tened piedad y misericordia de mí”. Tras la última estación hay una oración final y la bendición del sacerdote. 

Las estaciones del Via Crucis

El Via Crucis consta de 14 estaciones. Han sido pintadas y esculpidas por los mayores artistas a lo largo de la historia.
1.- Jesús es condenado a muerte
2.- Jesús es cargado con la cruz
3.- Jesús cae por primera vez
4.- Jesús encuentra a María.
5.- Jesús es ayudado por el Cireneo
6.- La Verónica enjuga el rostro de Jesús
7.- Jesús cae por segunda vez
8.- Jesús consuela a las santas mujeres
9.- Jesús cae por tercera vez
10.- Jesús es despojado de sus vestidura
11.- Jesús es clavado en la cruz
12.- Jesús muere la cruz
13.- Jesús es bajado de la cruz
14.- Jesús es colocado en el sepulcro

Los mejores Via Crucis de manos de los Santos

1. Via Crucis de San Josemaría











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