24 de mayo de 2020

Ejercicio del Mes de las Flores - Día 24

       Devoción Ejercicio del Mes de las Flores 

Esta devoción puede realizarse o bien por la mañana o por la tarde. Cada uno que la realice según el momento del día más conveniente. 

CÁNTICO: «VENID Y VAMOS TODOS»
Venid y vamos todos con flores a porfía
con flores a María
que Madre nuestra es.

De nuevo aquí nos tienes purísima doncella
más que la luna bella postrados a tus pies.


A ofrecerte venimos flores del bajo suelo
con cuánto amor y anhelo Señora Tú lo ves.


ORACIÓN PARA TODOS LOS DÍAS

         Señora y Madre Nuestra de la Esperanza, venimos a tu presencia, al finalizar (comenzar)  este día del mes de las flores, a presentar delante de tu Imagen las flores de nuestro cariño.

         Deseamos que este día haya transcurrido (transcurra) todo él bendiciendo y alabando al Señor y realizando su voluntad bajo tu mirada.

         Ayúdanos tú, Virgen nuestra, a realizar estos nuestros deseos, ya que en tu vida siempre realizaste la voluntad de Dios. Tú sabes que somos débiles, pero contamos con tu ayuda valiosa.

         Al acercarnos a ti durante este mes de mayo, te pedimos, Madre nuestra, que las reflexiones de estos días nos ayuden a conocerte mejor y a imitar tus virtudes, ya que somos hijos tuyos y tú eres nuestro modelo.

         Que la flor de este día nos ayude a parecernos a ti y a querer con todo el corazón a tu Hijo Jesús. Amén.

Día 24º
MARÍA, MADRE DE DIOS

         El fundamento y base de nuestra devoción y cariño a la Virgen consiste en algo muy sencillo, y a la vez muy importante, y que se puede enunciar en pocas palabras: María es la Madre de Dios.

         Nuestra fe cristiana confiesa unos hechos que tuvieron lugar realmente. Y así confesamos en el credo que "Jesucristo, Hijo único de Dios, por nosotros los hombres y por nuestra salvación bajó del cielo y por obra del Espíritu Santo se encarnó de María la Virgen y se hizo hombre". La mujer que con su cooperación hizo posible la venida del Hijo de Dios al mundo es recordada y venerada por todo el pueblo cristiano como la Madre de Dios.


         María es la mujer que tiene un papel y una función en la historia de la salvación: El Padre envió a su Hijo para que se hiciese hombre por obra del Espíritu Santo en el seno de María. Jesús, el hijo de María, es Dios como el Padre, es Dios de Dios, Luz de Luz. Esto hace que María sea no sólo la Madre del Mesías Salvador, sino la Madre de Dios. Así lo creemos y proclamamos todos los fieles cristianos.

            Éste es el primero y principal título de María, origen de todos los demás. Porque es la Madre de Dios será Inmaculada, limpia de todo pecado desde el primer instante de su ser. Porque es la Madre de Dios será siempre Virgen, consagrada enteramente al Señor. Porque es la Madre de Dios al final de su vida será asunta al cielo en cuerpo y alma.

         Jesús, nacido de María, es el origen y el motivo de nuestro culto a María, de nuestra veneración más sublime. Confesándola verdadera Madre de Dios, la reconocemos también como Madre nuestra, pues nos dio al autor de la vida y de la gracia, a Jesús nuestro Salvador.

         Que en estos días de mayo honremos a nuestra Madre, la admiremos más, confiemos más en Ella, porque es la Madre de Dios.

Pedir la gracia que se desee este día. 
Rezar tres avemarías. 

ORACIÓN FINAL
PARA TODOS LOS DÍAS

         Madre nuestra, hemos contemplado tu figura, nos has llenado con tu mirada. Ayúdanos a vivir los deseos que han brotado en nuestro corazón al contemplar tu belleza espiritual. Que siguiendo tus huellas, un día podamos contemplarte por toda la eternidad en la casa de nuestro Padre Dios.

         Ponemos en tu presencia nuestras intenciones y deseos. Te pedimos por nuestras familias para que sean como tu familia en Nazaret en la que resplandecían los tesoros del amor, la paz, la comprensión y la ayuda mutua.
        
Bendice a nuestra parroquia, a nuestro pueblo de Calasparra y a todos sus habitantes. Que el trabajo de este día nos ayude a todos a colaborar con la obra creadora de nuestro Padre Dios. Que el mundo entero pueda vivir en paz y con el deseo de ayudarnos mutuamente.

Desde este tu altar sigue mirándonos a todos tus hijos y que con la alegría de haberte alabado en este día volvamos llenos de gozo a nuestro trabajo diario. Y que mañana volvamos a reunirnos bajo tu manto y tu mirada cariñosa. Amén.

ORACIÓN BENDITA SEA TU PUREZA

Bendita sea tu pureza y eternamente lo sea, pues todo un Dios se recrea en tan graciosa belleza; a Ti, celestial Princesa, Virgen sagrada María, te ofrezco desde este día alma, vida y corazón. ¡Mírame con compasión, no me dejes, Madre mía!




No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por tu participación.